Entradas populares

viernes, 25 de febrero de 2011

CISNE NEGRO



Llevaba queriendo ver esta película desde la primera vez que visioné el trailer y lei el argumento. Siempre me ha gustado esta actriz, el tema de la danza me resulta muy atractivo y el director (Darren Aronosfky) siempre consigue despertar mi curiosidad por lo raro y poco convencional de sus obras. No obstante, Cisne Negro ha superado mis espectativas.

La protagonista, Nina (Natalie Portman) es una joven habitante de la ciudad de New York que vive entregada al ballet con cada una de sus células (como les suele ocurrir a las personas que trabajan en este arte, o en disciplinas como la gimnasia, etc.). Tras despedir a la bailarina principal de la compañía, el director de arte de la misma elige a Nina como protagonista principal de la representación que abrirá la temporada de ballet: El Lago de los Cisnes.
Nina reúne para este papel la técina precisa, la entrega, la regia disciplina, la dulzura, la pureza, la agilidad; Es casi perfecta. Pero sólo casi...La reina cisne debe representar alternativamente la figura del cisne blanco, virginal, puro, dulce, casi étereo diría yo, pero también las del cisne negro, impulsivo, lujurioso, sensual, sexual...
Por este motivo, Nina se ve amenazada por la nueva bailarina de la compañía, Lily, personificación del cisne negro.

Los celos, la ambición y el deseo de perfección, conducen a Nina a entrar en contacto progresivamente con su lado oscuro, su Cisne Negro. No diré que ocurre al final entre cisne blanco y cisne negro porque supondría destripar el filme. Lo que sí diré, es que cada expresión de la actriz principal, demuestra una dedicación muy profunda al papel que le ha sido asignado en la película. Todo el que la vea, se creerá a Natalie Portman. Creerá lo que siente, lo que piensa, lo que teme, lo que ansía...

Ella es una de las dos razones principales por las que la película me ha encantado. ¿La otra?
El filme es una metáfora visual en sí mismo: desde que comienza, con el sueño de la protagonista, hasta que finaliza, con algo que no revelaré.
Una metáfora entre el bien y el mal, entre el impulso y la reflexión, entre la cara y la cruz, entre lo blanco y lo negro que poseemos las personas y sobre todo, una metáfora de cómo el desequilibrio entre ese ying y yang q todos llevamos dentro puede ser dolorosamente destructivo.

Animo a todo el mundo a ver la película, puede gustar o no, pero es indiscutible que el tema es interesante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario